Ciudad de México. A 12 de Octubre de 2018.- Se cumple un aniversario más de la fundación de las Águilas del América. 102 años de éxitos y fracasos, de amor y odio, alegrías y tristezas, heroísmos y villanías, y de un gran legado a nivel nacional e internacional del equipo más ganador de México.
Aquel humilde equipo integrado por jóvenes mexicanos, creado en los antiguos llanos de la Condesa en 1916 poco a poco fue ganando adeptos ente la naciente afición mexicana, que veía en el América una opción para disfrutar del fútbol, lejos de los poderosos equipos españoles.
Nombres de la talla de Rafael Garza Gutiérrez, Alonso Sordo Noriega e Ignacio de la Garza empezaron a poner el nombre del América en los primeros planos, al grado de formar parte de la selección nacional en sus inicios; en la década de los 70 brillaría con luz propia el chileno Carlos Reinoso, rodeado de otras figuras que a la postre se compertirían en leyendas del equipo americanista. Mientras que en la década de los 80 serían los Alfredo Tena, Cristóbal Ortega, Héctor Miguel Zelada, Eduardo Bacas los que encumbrarían a las recién nacidas Águilas en la gloria futbolística.
El banquillo americanista también ha visto pasar hombres de gran talla. Arrancando por el mismo ‘Récord’, pasando por el histórico Carlos Reinoso, el “antichiva número 1” José Antonio Roca, Miguel Ángel López, Jorge Vieira, Leo Beenhakker y sus ‘Águilas africanas’, finalizando con Manuel Lapuente, Mario Carrillo, Antonio Mohamed, Gustavo Matosas, Ignacio Ambriz y Miguel Herrera, autores intelectuales de sus últimas glorias.
Gran parte del éxito azulcrema radica en los mencionados 80s, en donde cosecharon gran parte de su palmarés nacional. En contraste, los 90’s, a pesar de la presencia de elementos de la categoría de Juan Hernández, Raúl Rodrigo Lara, François Omam-Biyik, Kalusha Bwalya y Luis Roberto Alves ‘Zague’ pasaría sin pena ni gloria por Coapa. Eso sí, se daría el surgir futbolístico del ídolo americanista por excelencia: Cuauhtémoc Blanco.
A pesar de los años, el América ha logrado adentrarse en el corazón de su creciente afición a base de actos heróicos. Carlos Reinoso y Enrique Borja se ganaron la admiración de todos gracias a los cetros en los años 70’s. La atajada de Zelada en la final ante Chivas en 1984 es la punta de lanza para los románticos del americanismo, y la final de película ante Cruz Azul en el 2013 es el cetro que abrazan las nuevas generaciones azulcremas.
Con información de MARCA.