Xalapa, Veracruz, a 16 de marzo de 2022.- En el abandono y saqueadas están las unidades médicas móviles de la Secretaría de Salud, las cuales se deterioran en un encierro de vehículos ubicado en el municipio de Banderilla. De ese lugar, una red de ladrones que laboran para la dependencia ha saqueado poco a poco los equipos médicos que tienen un alto costo en el mercado, según denuncias.
Las unidades médicas equipadas fueron parte de un ambicioso programa implementado durante el sexenio del exgobernador Javier Duarte. La intención era que pudieran llegar a las localidades más apartadas del estado, en donde una vez que la población se atendiera, si había necesidad de practicarse estudios, tenían a la mano el equipo necesario, como densitometrías óseas, mastógrafos, dispositivos Doppler, ultrasonidos, entre otros aparatos.
De acuerdo con los reportes de la Cuenta Pública 2014, el costo de estos equipos, junto con otros implementos y ambulancias, tuvieron un costo total de 140 millones de pesos, que lentamente se pierden en el encierro de vehículos.
Los datos más recientes señalan que hay una denuncia presentada en la Unidad de Atención Temprana de la Fiscalía General de Veracruz, bajo el número 4344/2021 presentada entre junio y julio de 2021, ante la Fiscal Delma Yameli González Escobar, quien tras recibir la denuncia la mantuvo inmóvil. En enero, la misma fiscal fue comisionada al área de litigación de la sala de Juicios Orales, en Pacho Viejo y con ello las carpetas de investigación que estaban a su cargo permanecieron inmóviles.
Este abandono provocó que la denuncia quedara en el archivo durante ocho meses y esta es la fecha que aún no definen a quién se la asignarían. Pero no todo es responsabilidad de la Fiscalía, pues el representante jurídico de la Secretaría de Salud, Francisco Israel Sobrevilla, tampoco le ha podido dar seguimiento al tema.
Las personas vinculadas a estos saqueos ya están identificadas, hay pruebas de los saqueos y testimonios que señalan que uno de los sospechosos se dedicó a desmantelar las unidades sobornando a los vigilantes del encierro de vehículos de la Secretaría de Salud. Esta persona se desempeña en el área de servicios generales y es quien tuvo a cargo inventarios, lo que sirvió para que pudiera dar de baja algunos equipos que, consta en la denuncia, llevó a esconder a casa de familiares.
Pantallas, gatos hidráulicos, herramientas, tanques de oxígeno, llantas de tráiler y rines de camioneta son parte de lo que el cabecilla de la red mantiene ocultos en bodegas que ha habilitado con la complicidad de otros empleados y que son del conocimiento de las autoridades de la Secretaría de Salud.
El pretexto es que “lo quieren atrapar con las manos en la masa”, pero a ocho meses de la presentación de una denuncia que no ha avanzado, hace suponer a los denunciantes que hay un encubrimiento.
Información de Excélsior.