Acuchilló y mató a Ana porque no quiso ser su novia

Salamanca, Gto. 28 de noviembre de 2020.- En audiencia de juicio oral, un sujeto fue sentenciado a pena privativa de libertad de 45 años, al ser encontrado culpable del delito de feminicidio. Daniel “N” agredió a Ana Gabriela “N” con un objeto punzo cortante con el cual le produjo lesiones en la región frontal y cervical y cuando la mujer yacía en el suelo la golpeó con un bloque de material de construcción provocándole la muerte, todo porque la mujer se negó a tener una relación de noviazgo con él.

 

Como resultado de la investigación que realizó la Fiscalía General del Estado a través de la Unidad Especializada en Investigación de Homicidios, Daniel “N” fue localizado y aprehendido por elementos de la Agencia de Investigación Criminal, y fue dejado a disposición de un Juez, quien lo vinculó a proceso tras la imputación formulada por el agente, por el hecho que la ley señala como delito de feminicidio.

 

La Fiscalía General del Estado acreditó la responsabilidad del imputado como probable interviniente en los hechos ocurridos el 07 de diciembre de 2017, en el lapso de las 19:10 y las 21:00 horas, cuando la ofendida y el imputado acudieron a un área recreativa, ubicada en la calle González Villarreal en la colonia Villarreal, en esta ciudad.

En dicho lugar Daniel agredió a Ana Gabriela, en un principio con un cúter, un objeto con características punzo-cortantes, y le produjo lesiones en la región frontal y cervical y cuando la mujer se encontraba lesionada en el suelo, el hoy sentenciado golpeó la cabeza de la mujer con un bloque de material de construcción en por lo menos tres ocasiones, provocándole con ello la muerte, a consecuencia de un traumatismo cráneo facial.

 

El enojo del hombre fue debido a que pretendía iniciar una relación de noviazgo con Ana Gabriela, pero ésta última se negó y por el contrario le pidió a Daniel que no la siguiera buscando.

 

En esta fecha, un Juez resolvió dictar sentencia condenatoria y le impuso al acusado un total de 45 años de prisión, una sanción económica y la reparación del daño a favor de la víctima indirecta, además del pago por gastos funerarios