León, Gto., 28 de Octubre del 2024.- Las medidas preventivas que toda mujer debe adoptar, con relación al cáncer de mama, tienen que ver con los factores de riesgo para desarrollar la enfermedad, por lo que hay que identificarlos, ya que existen modificables y no modificables; la información al respecto permite abonar en la detección oportuna.
“Es importante conocer con qué factores de riesgo se cuenta como mujer, algunos modificables, los cuales debemos reducir, son el sobrepeso y la obesidad a través de la actividad física al menos 30 minutos al día, tener alimentación balanceada y saludable, reducción del consumo del alcohol y de tabaco, y las mujeres que tienen bebés practicar la lactancia materna exclusiva”, señaló la licenciada Irma Ponce Trujillo, coordinadora de Enfermería en Salud Pública, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guanajuato.
Indicó la funcionaria del Seguro Social que científicamente está demostrado que evitar estos factores reduce el riesgo de padecer cáncer de mama, para lo cual el Instituto cuenta con orientación al respecto en sus Unidades de Medicina Familiar (UMF) en diferentes municipios del Estado.
Agregó que, la otra parte importante es que las mujeres acudan al Instituto a recibir atención preventiva, a través de los métodos de detección como la exploración clínica, la mastografía, y en el hogar la autoexploración.
Resaltó que, el IMSS en el estado cuenta con programas y protocolos de atención integral que se trabajan de forma permanente en las UMF y también extra muros con el objetivo de reducir o evitar padecer esta enfermedad oncológica.
“El área de Enfermería en Salud Pública nos dedicamos a fomentar en las mujeres la educación en salud. Primero, a partir de los 19 años se inicia la orientación para que cuando tenga 20 ya cuente con el conocimiento y el hábito de la autoexploración mensual”, dijo Ponce Trujillo.
Como segundo método de detección, dentro de las unidades médicas e incluso en las empresas directamente, el personal capacitado realiza exploración clínica de mamas tratando de identificar una posible lesión o cambio que la propia mujer no haya detectado en su autoexploración, y como tercer método y no menos importante, agregó, es la mastografía, indicada en mujeres de 40 a 69 años, que se realiza a manera de detección cada 2 años, para lo cual el IMSS cuenta con mastógrafos internos, así como con servicio subrogado de apoyo.
Destacó que, el Instituto está comprometido en la lucha contra el cáncer de mama, no solo dentro de las unidades, sino haciendo accesibles los servicios en los centros laborales de las mujeres trabajadoras a través de PrevenIMSS en Empresas.
Concluyó diciendo que la detección oportuna es vital para lograr un mejor pronóstico para la paciente.